El proyecto pondrá en marcha un fondo de 4 millones de dólares (2 millones de dólares del Laboratorio del BID y 2 millones de dólares del Fondo del Laboratorio de Capital Natural Francia – BID) de inversión flexible para cerrar las brechas de financiamiento, expandir las empresas e impulsar la economía regenerativa en América Latina y el Caribe (LAC) mediante el desarrollo de una cartera de empresas más sólida en los siete países: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Suriname.
La inversión adicional en proyectos de regeneración dará lugar a un aumento de la superficie de los paisajes bajo una mejor gestión que protegerá la biodiversidad. Los sectores a los que se apunta incluyen la silvicultura no maderera, los productos forestales certificados, la biofarmacia, los servicios ecosistémicos, la agricultura regenerativa, la biomedicina, la biobelleza, el bioembalaje, los productos de limpieza biológicos y los aceites esenciales, entre otras empresas que regeneran los ecosistemas naturales.